Partitura y tablatura para guitarra, con descarga gratuita en un clic, de la melodía Greensleeves.
Esta deliciosa melodía inglesa del siglo XVI siempre ha sido uno de los clásicos que todos los guitarristas tocamos alguna vez en nuestra vida. Es realmente preciosa. Dicen que la compuso el rey Enrique VIII, pero de eso no hay certeza. De los que sí podemos estar seguros es de que tiene unos 500 años de antigüedad y sigue llegando a nuestros corazones.
La original está el compás de 6/8, pero como sé que los compases de subdivisión ternaria se aprenden cuando avanzamos más en los estudios musicales, la he escrito en 3/4, compás de tres tiempos, de subdivisión binaria, para que sea más fácil a los principiantes. Con este cambio no se pierde apenas nada en los acentos y se vuelve todo más fácil.
Para aquellos bolsillos que no estén en situación de invertir más de $200 en una guitarra, hay en el mercado una gama de instrumentos muy decentes, por lo que, siguiendo unos consejos básicos, se puede acertar plenamente en la compra.
Teniendo en cuenta precisamente este presupuesto, hemos analizado cómo está el mercado de guitarras acústicas de gama económica. Solo hemos tenido en cuenta aquellas guitarras con tapa maciza, ya que los instrumentos de tapa laminada no los recomiendo en ningún caso. Todos estos instrumentos juegan en la misma liga: tapas macizas, cajas laminadas, mástiles de caoba, diapasones de palisandro, mecanismos de afinación decentes. Instrumentos que no defraudarán, aunque no esperemos tampoco prestaciones de instrumentos de gama alta. Y como digo siempre: si tu presupuesto es corto, olvídate de previo y electrónica, e invierte tu dinero en madera.
Epiphone AJ-220S Natural ($269)
Epiphone está produciendo instrumentos de bajo coste que dan muy buen resultado y de una estética muy potente. Esta guitarra tiene la tapa de abeto Sitka macizo, lo cual ya es garantía de un mínimo de calidad en el sonido. El mástil es de caoba, con sección cómoda, y los aros y el fondo de caoba seleccionada laminada. Diapasón de palisandro. Tiro de 647 mm y ancho de cejuela de 43 mm. Mecanismos de afinación de buena calidad. En la web del fabricante se elogia la potencia del sonido y el buen balance, y por lo que mehos podido escuchar, no se equivocan los chicos de Epiphone.
Jasmine JD-39 ($190)
Esta Jasmine tiene la tapa seleccionada de abeto (no se especifica el tipo o si es maciza), con un barrado especial de la casa en forma de X. Los aros y el fondo son de sapelly laminado y el mástil de nato. Diapasón de palisandro. Los mecanismos de afinación son estándar, así como las cejuelas, que son de hueso sintético (o sea, plástico). La Epiphone tiene en esta guitarra un fuerte competidor, tanto por la calidad de la construcción como por la potente estética. Como característica destacada y especial cabe destacar el tiro corto de 629 mm, lo que la hace más blanda de tocar que los instrumentos de tiro más largo. La cejuela tiene un ancho de 43 mm.
Yamaha FG800 ($240)
Otro duro competidor para el mercado americano. Yamaha produce buenas guitarras de gama medio-bajo. Este es un ejemplo. Por menos de $250 podemos comprar una guitarra con tapa de abeto Sitka macizo y una estética muy cuidada. Los aros y el fondo son laminados de nato/okume. Lleva las barras rebajadas para un mejor sonido. Guitarra con buenos agudos y graves, así como una respuesta rápida y un tono cristalino.
Recording King RDH-05 ($190)
Ya sé que soy muy pesado con las Recording King… ¡pero es que suenan tan bien! Este modelo está inspirado en instrumentos norteamericanos de los años treinta, como las Montgomery Ward que se pedían por correo. Tapa de pícea maciza, aros y fondo de chopo chapado (madera económica simplemente para darle base al acabado sunburst estilo antiguo), mástil de nato, diapasón de palisandro y cejuelas de hueso. Tiro de 645 mm y cejuela de 43 mm.
Todos estos instrumentos son una buena opción para iniciarse en el mundo de la guitarra acústica. Son instrumentos con cuerpo dreadnought, un tipo de cuerpo estándar con buena proyección de graves y buen registro agudo, siendo el registro medio menos presente. No suelen ser lo mejores instrumentos para fingerpicking (técnica de tocar con uña), aunque sí cumplen esta función con solvencia. Son idóneos para tocar con púa y acompañarse de ritmos.
Hemos analizado cuatro instrumentos que reúnen el mínimo de calidad exigible en esta gama de precios, aunque en las tiendas encontrarás muchas guitarras similares. Nuestro consejo va más enfocado a las características y calidades que cabe esperar que a las marcas en sí.
En este artículo te explico cómo debes limarte y pulirte las uñas para tocar la guitarra. También podrás aprender a darle a tus uñas la forma adecuada para obtener un buen sonido.
El uso de uñas para pulsar las cuerdas de la guitarra e instrumentos afines es muy antiguo. Sabemos que algunos laudistas se servían de ellas desde el siglo XVII, y que los más grandes maestros de la guitarra del siglo XIX usaron uña en el pulgar. Sin embargo, hasta la implantación del uso del nylon y el acero en las cuerdas no se generalizó el uso de las uñas.
Hoy en día es impensable tocar la guitarra acústica o clásica sin uñas, pues estas son, junto a las cuerdas, uno de los elementos que permiten que nuestro instrumento dé lo mejor de sí en nuestras manos.
En este artículo os voy a explicar cómo darle forma y limar nuestras uñas para obtener el mejor sonido de nuestras guitarras.
¿TENGO QUE DEJARME LAS UÑAS LARGAS PARA TOCAR LA GUITARRA?
Sí, pero solo las de la mano derecha (con excepción del meñique, que no se usa en la guitarra acústica o clásica, en cambio sí se usa en el flamenco).
¿QUÉ LONGITUD HAN DE TENER LAS UÑAS?
Desde mi punto de vista, lo ideal es que sobresalgan de la yema entre 1 y 1.5 mm en el índice, anular y medio. En el pulgar, la uña actúa de forma diferente y es mejor dejarlo a criterio del intérprete, pero debe sobresalir al menos 2-3 mm desde el extremo de la yema. Por lo tanto, quienes tengáis el crecimiento de la uña muy bajo, necesitaréis la uña más larga para alcanzar ese milímetro o milímetro y medio sobre el extremo de la yema, y quienes tengáis el crecimiento de la uña muy alto, necesitaréis una uña más corta.
Vista posterior de los dedos de la mano derecha. Las uñas de los dedos índice, medio y anular apenas sobresalen 1 mm del extremo de la yema
¿Por qué esta medida en los dedos índice, medio y anular? Porque con esa medida la yema está en contacto con la cuerda. Esto significa que el tacto actúa como referencia para que nuestro cerebro mida la distancia a la cuerda, proporcionándonos mayor precisión que si tocáramos con una uña cuyo extremo distara mucho de la yema.
En las siguientes imágenes lo veréis con mayor claridad:
Esta imagen muestra como, mientras más alto es el crecimiento de la uña, menor deberá ser su longitud
¿QUÉ FORMA HAN DE TENER LAS UÑAS?
Particularmente sigo utilizando la forma de uña que me recomendó en mis tiempos de estudiante uno de mis profesores del conservatorio. Esta forma me ha dado excelente resultado, y no he necesitado cambiarla tras muchos años de práctica y estudio.
La forma de uña que recomiendo tiene un pequeño reborde en la zona de contacto con la cuerda, luego tiene una zona más o menos recta para que la cuerda se deslice sin problemas y otro reborde al final para imprimirle brillo al sonido (este último reborde lo encuentro útil en la guitarra clásica, pero no lo veo necesario en la guitarra acústica, al ser su timbre muy brillante):
La forma de la uña no ha de seguir la forma del dedo, ambas formas son independientes. La uña no quedará simétrica, sino con su extremo más largo desplazado hacia la derecha.
Yo uso una lima de acero para darles forma, y luego una lima de tres grosores para pulirlas. Comienzo con la lima de acero y luego paso a la parte más gruesa de la lima de pulir, hasta llegar a la más fina. Es fundamental tener las uñas pulidas para evitar enganches y ruidos indeseados al tocar, sobre todo en la guitarra clásica.
LA TÉCNICA DEL «BOOM-CHICK»
Esta técnica fue puesta de moda en los años 50 y 60 por guitarristas como Chet Atkins, y se es usada mucho hoy en día por grandes maestros como Tommy Emmanuel. Consiste en apagar las cuerdas más graves con la cara externa del pulgar, al mismo tiempo que se pulsan los bajos. En Estados Unidos suelen hacer el boom-chick usando una púa especial para el pulgar, pero yo he encontrado estas púas muy incómodas, y prefiero buscar una posición en el pulgar que me permita pulsar la cuerda sin necesidad de la púa de pulgar. La posición paralela a la cuerda que adquiere el pulgar no permite el contacto de la uña con la cuerda, por lo que pulso con yema, pero a mí me convence el sonido, aunque reconozco que con la púa los bajos suenan más incisivos y marcados en esta técnica. Y, como una imagen vale más que mil palabras, os enlazo un vídeo en el que interpreto un tema mío en el que utilizo el boom-chick en los graves:
Espero que os haya sido útil este artículo. Y, como siempre os digo: si tenéis alguna duda, escribidme. También pido que no uséis mis imágenes sin mi permiso, y menos para escribir un artículo en una revista de conservatorio, como ha ocurrido, que eso está muy feo). Gracias!!!
¡A disfrutar!
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