Comenzar en la música a una edad temprana y a través del juego es eficaz y positivo, esto es algo sobradamente demostrado. ¡Cuántos buenos guitarristas han empezado a tocar con una guitarra vieja que andaba por casa o a hurtadillas con el instrumento de algún familiar!
El hecho de tocar el instrumento, observar cómo está construido, cómo funcionan los mecanismos de afinación, cómo cambia el sonido de las cuerdas al tensarlas o destensarlas… todo eso es un aprendizaje y suma en la experimentación del niño con la música. Aprender jugando es una maravillosa forma de aprender, de eso no cabe duda.
Pero lo que nos trae aquí es si merece la pena comprar una guitarra de juguete, y para ello vamos a analizar un instrumento de estas características que se puede adquirir actualmente en una conocida cadena de supermercados de España por un precio de 39,90€. He de decir que también he visto este tipo de instrumentos en un conocido comercio de instrumentos musicales de mi ciudad, lo cual me parece incomprensible. También lo he visto en tiendas online. Se trata del mismo perro pero con distinto collar, es decir, un instrumento chino muy económico que se etiqueta con decenas de nombres diferentes.
Lo primero que podemos comprobar es que el etiquetado está hecho en base a la normativa sobre juguetes infantiles, por lo que ya de entrada debemos tener presente que estamos hablando de un juguete, no de un instrumento musical. De hecho, en la etiqueta indica claramente: «OBJETIVO DEL JUEGO» y «ANTES DE JUGAR».
La construcción es de ínfima calidad, con algunas partes de madera chapada y otras de ABS. Incluye una funda muy fina que solo sirve para evitar el polvo. Aún así, el aspecto da el pego, porque tiene el aspecto de un instrumento de verdad.
Observando el instrumento más de cerca apreciamos la tapa laminada y la pésima calidad de los materiales, aunque tratándose de un juguete y a ese precio hay que reconocer que al menos los materiales y la apariencia son aceptables.
Hasta aquí, todo va bien. Incluso algunos padres deseosos de ahorrarse unos eurillos se podrían preguntar ¿por qué no comprarle está guitarra a la niña y si vemos que puede tocar algo ya pasamos un instrumento de mejor calidad? Pues bien, la respuesta está en la siguiente imagen:
La anchura de la cejuela es demasiado reducida (no llega a 40 mm), lo cual hace que los dedos no quepan a la hora de poner los acordes. Por lo tanto, no se han tenido en cuenta las medidas elementales para poder tocar incluso a un nivel muy básico. Esta característica nos indica por dónde van los tiros, y hace desaconsejar la compra este tipo de juguete, ya que hay en el mercado guitarras y ukeleles muy económicos y con medidas estándar en la cejuela, que además de poder ser usados como juguetes pueden servir para dar unos primeros pasos con la música.
Mi recomendación en este caso es comprar una guitarra o ukelele muy barato, que sirva como un juguete, pero que también pueda utilizarse más adelante para hacer música. Obtendremos así dos artículos (un juguete y un instrumento musical) por el precio de uno.
He utilizado ukeleles económicos en mis clases de música con alumnos de 11 y 12 años, y han demostrado que son resistentes, afinan correctamente, cuestan solo unos euros más que las guitarras de juguete, y lo que es más importante ¡sirven para hacer música de verdad! Los que mejor conozco son los de la marca Kala Makala, que me han funcionado muy bien en clase:
En cuanto a guitarras para niños, recomiendo tener mucha precaución al comprarlas online, porque este mismo juguete que he escrito más arriba se comercializa como guitarra de verdad en tiendas online, pero con otra marca. En caso de comprar online, recomiendo adquirir un instrumento en cuya descripción aparezca el ancho de cejuela, tal es el caso de las guitarras Voggenreiter, que cumplen el requisito de tener medidas estándar (45 mm) y por tanto sirven para jugar y también para tocar:
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Sea cual sea el instrumento que elijas, la decisión más importante ya la has tomado, y es la decisión de iniciar a tu hijo en la música, así que ¡enhorabuena por esta iniciativa tan positiva!